Ya empieza a llegar el frío, y como no, en Galicia viene mucho frio. La tarde que hice este bizcocho recordé una tarde lluviosa de hace cuatro años, cuando mi abuela me dio la oportunidad de hacer mi primer bizcocho solo.
Lo que lié ese día me voi a acordar toda la vida, porqué ese día, ese bizcocho parecía un ladrillo crujiente, porque eso estaba muy duro, y además tenía cascaras de huevo. La receta que hice la ultima vez, no estaba para nada duro y esta vez no es crujiente.